mayo 23, 2006

CÓMO COTIZAR LA CABEZA DE TU ASESINO.

SERIE: APRENDIENDO EL ABC DE LA VIDA.

 

Dejando atrás la superstición de haberme levantado hoy con el pie izquierdo, -al final sólo es un pie-, decidí con total convencimiento dar los siguientes pasos del día con el objetivo de hacer mi muerte algo valioso y trascendental. Resulta que hoy en día podrán morir millones de personas del común -como tú o yo- y solo los amantes apasionados de los realitys disfrutarían del espectáculo en la franja del noticiero y/o impreso a blanco y negro en la última página de los periódicos locales. Nuestros iguales -los del común- observarían esos cuerpos baleados, empalados, torturados, apuñalados o destrozados por una bomba que fue lanzada con intentos de mantener la paz. Sin sorpresa. Con una resignación inmovilizadora. Estáticos alimentando su naturaleza morbosa habituada por los medios de comunicación.

Debemos comenzar a preparar las circunstancias para lograr hacer de la cabeza de nuestro asesino lo más costoso del mercado, para no sólo ganarnos millones de "Pobrecito" o dos billones de "tan bueno que era". Creo que las posibilidades de ser asesinados cada día aumentan más: trifulcas con el carnicero en la plaza del mercado, un crimen pasional, el grupo subversivo “X” cree que simpatizas con el grupo subversivo “Y” o una bala perdida, en fin. Morir naturalmente ya es lujo de pocos.

Hay que recordar que no importa cuantos panes o litros de leche dejemos de comer para pagar los impuestos que harán mucho más jugosa la recompensa. A la larga, no es la vida (o la muerte) de nosotros -los ciudadanos de quinta- la que importa, sino la de ellos, de los que "tienen cómo" sin trabajar honradamente por ello. Es así como estamos llamados a invocar los grandes espíritus para que nos protejan y cuiden incluso más allá de nuestra muerte: el espíritu del dinero y del poder. El resto estará garantizado por añadidura.


Pero entonces, ¿Cómo un simple mortal podrá hacer que la cabeza (y los pies también) de su asesino (o asesinos) se cotice? Veamos algunas ideas:



1. Lo primero que debes hacer es vivir en un país donde exista la democracia, es decir, un país donde se puedan imponer gobernantes y grupos políticos, ya sea por medio del proselitismo electoral o la violencia, al final para ellos es lo mismo.

2. Deberás ser muy allegado de algún político. Si eres su familiar, (esposa, esposo, primo lejano, cuñado), podrás dar grandes pasos a nuestra meta final. Ojalá elijas a algún político que haya sido presidente de ese país.


3. Consigue como sea cincuenta mil votos y conviértete en senador de la república, concejal, congresista, cualquier "titulo noble" que puedas ostentar en alguna situación de riesgo.

3. Deberás buscar tu asesino en tiempo de elecciones. Si el presidente actual quiere ser reelegido mucho mejor. Lograrás recompensas más jugosas.

Fácil, ¿no? Lo único que deberás hacer es aspirar a ser un "ciudadano de primera". No vale que intentes crearles oposición, ni debatirles, ni mucho menos ser como eres. Deberás recrear muy bien sus ideales de los políticos pudientes en ti.

En la próxima edición
Estreno en cine: "Reelecto: Cuestión de método."
Editorial: "¿Cómo besar traseros sin morir en el intento?"

 

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